Un marinero estadounidense que ha creado una embarcación autónoma del tamaño de una lavadora, lleva desde diciembre a la espera de un permiso desde Tenerife para echarse al agua. La Guardia Costera de Estados Unidos en Florida le ha dado la autorización para poder llegar a su costa como embarcación legal. Las autoridades en España le dieron permiso. Pero se lo han denegado después. Le piden una póliza de seguro por si hay que sacarlo del agua a mitad del Atlántico. Matt Kent, diseñador del proyecto, tiene ocho años de experiencia en navegación a vela.
La idea de cruzar el Atlántico en una embarcación del tamaño de un ataud surge porque el Día del Padre de 1993 alguien hizo lo mismo en el Reino Unido. Hizo la travesía en 106 días. Este tipo de retos constan en la navegación desde 1846.
El barco que tiene en La Gomera comenzó a construirlo en 2012 y vino a las islas a través de un carguero. A su juicio, el desafío está en el diseño del barco y en la planificación de cosas como elalmacenamiento de alimentos y el ejercicio físico para un viaje tan largo en un bote tan pequeño.
Espera resistir entre tres y cinco meses en el mar. Los beneficios que espera obtener trasladando su experiencia a un libro y a un documental irán a parar a estudiantes con menos recursos de Nueva York. La comida del «Impávido» se lleva su espacio. El marinero espera quemar 106.000 calorías en su viaje aunque lleva 266.000 calorías. Si el viaje dura 4 meses, sería un promedio de 2.000 calorías diarias.
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